Conciertos asequibles para miles de personas y miniteatros de barrio: la apuesta de Rivas para llenar sus calles de cultura

Los grandes recintos para conciertos en la Comunidad de Madrid se pueden contar con los dedos de una mano: están el Wizink, el Metropolitano, el Bernabéu, Vistalegre y, fuera de la capital, el Miguel Ríos de Rivas Vaciamadrid, un lugar que para muchos grupos se ha convertido en uno de sus lugares fetiche.

El último gran evento que albergó este graderío con capacidad hasta para 35.000 espectadores fue el K-Pop Music Bank, un enorme espectáculo para fans de la música coreana que se había quedado sin espacio por la cancelación de los conciertos en el estadio del Real Madrid. El próximo llegará en la primavera de 2025, con la recién anunciada actuación de La Raíz, una de las cabezas destacadas de cartel en las Fiestas de Rivas del año que viene.

El Miguel Ríos representa la parte más visible de la apuesta por la cultura del Ayuntamiento de Rivas y la que más gente reúne al mismo tiempo, pero solo es la punta de un iceberg de una agenda que se extiende por toda la ciudad y que contempla grandes actuaciones en ese espacio o en el auditorio Pilar Bardem, las dos joyas municipales para el directo, pero también “refugios culturales”, más pequeños y accesibles, diseminados por los barrios.

“Además de tener un espacio enorme donde promover la cultura, tenemos que conseguir llevarla a todos los rincones de Rivas”, explican desde el Ayuntamiento al contar el proyecto en el que trabajan para hacerlo, dentro de la Agenda Urbana 2030. “No se trata de construir centros culturales en cada esquina, sino conseguir abrir espacios amables como miniauditorios donde podremos plantear una actuación de títeres o escuchar declamar a un poeta, usando un QR desde tu móvil”, añaden. Se tratarán de entornos de ocio situados en la comunidad de referencia local para cada vecino.

El plan para expandir la cultura de proximidad enlaza directamente con Renatura, uno de los proyectos más importantes de la Agenda Urbana de Rivas y que será una realidad este 2025. A través de varias conexiones ecológicas por la ciudad se abrirán refugios climáticos con los que resguardarse de las temperaturas extremas, que en algunos casos podrán ser replanteados como los citados refugios culturales. Renatura cuenta con el apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica, a través de la Fundación Biodiversidad. La concejalía de Cultura hará la puesta de largo.

Festivales y público que se convierte en actor

Los eventos son otra de las señas de identidad del municipio, como el Festival Cultura en la Calle, que llega cada mes de septiembre, y que es el más destacado de una temporada que arranca con las fiestas de mayo - de referencia en la región - y que se extiende hasta octubre, a los que se añaden otras citas como el festival de teatro aficionado FESTEAF o el Festival de Cine, con tres concursos de cortometrajes. A estos se suman otros eventos que el ayuntamiento coorganiza o apoya, como Danza Rivas o el Festival Rivas Flamenca, que hermanado con el prestigioso Festival de Cante de las Minas de La Unión (Murcia) trae a la ciudad a los mejores referentes del mundo del flamenco, como Miguel Poveda, José Mercé o Carmen Linares, o el LesGaiCineMad, organizado por la Fundación Triángulo y del que Rivas es subsede.

Una sucesión de festividades que tiene también una parada especial en el Carnaval, por el que algunos se refieren a la ciudad como Rivas de Janeiro en esta época.

Detrás de este listado de eventos y actividades está una filosofía municipal que se apoya sobre tres patas, explican desde el Ayuntamiento: “La primera es que la ciudadanía pueda experimentar su vivencia como público” y que las propuestas que se gestionen desde el municipio sean “muy excelentes, de calidad, además de baratas y accesibles”, recalcan acerca de un programa de actuaciones muchas veces gratuitas y otras a precios muy asequibles gracias a los abonos municipales, el teatral - que incluye también espectáculos de danza - y el sinfónico, a los que se suma el programa cultural familiar, a precios reducidos. 

Las propuestas buscan implicar especialmente al público desde la infancia y también incluir a la juventud, por lo que se potencian las actividades dirigidas a estos grupos de edad, con gran presencia en el municipio (el 35% de la población de Rivas tiene menos de 24 años). También se busca potenciar el patrimonio cultural propio, del que es un ejemplo la Orquesta Sinfónica Alma Mahler, que en las Fiestas de Mayo de 2023 dió su primer concierto, así como coordinar las actividades culturales con otros agentes de la ciudad, como el caso del comercio local, con el que se comparte la programación navideña.

Como segunda pata de la actividad cultural ripense está que la población pueda experimentar su propio espacio expresivo. Es decir, que sea capaz de formarse en diferentes disciplinas culturales. “La ciudadanía de Rivas es muy participativa, quiere hacer las cosas y vivirlas”, apuntan en la concejalía, poniendo ejemplos como la Cabalgata de Reyes, que organizan las familias desde los colegios; o la Carpa de Circo, que junto al centro juvenil La Casa+Grande, permite disfrutar de espectáculos de arte circense y formar a la población infantil y juvenil en el mundo de las acrobacias, los malabares y el clown. Mientras, explican que su misión es ofrecer espacios en los que puedan aprender y a la vez experimenten con sus creaciones. En este sentido, la ciudad apuesta por poner al mismo nivel los espacios profesionales y los aficionados, de aprendizaje y experimentación, para que puedan convivir e interactuar.

Por último, la tercera línea de trabajo es la ya citada de los refugios culturales, ligados a la ciudad de los quince minutos. Y en el lado de las infraestructuras, la gran apuesta cultural de la legislatura es la construcción de una gran Escuela Municipal de Música, a la que se destinan 8 millones de inversión de los presupuestos para 2025, recientemente aprobados. Se acaban de adquirir varios locales que permitirán responder a la alta demanda que la Escuela tiene, y  que se suman a los que ya fueron adquiridos en 2020 para convertirse en nuevas aulas y locales de ensayo. Además, esta Escuela, a diferencia de otras escuelas municipales de la Comunidad de Madrid, es pública y sigue sostenida por la gestión directa municipal.

Lugares físicos en los que el Ayuntamiento quiere que se pueda desarrollar la cultura, entendida en sentido amplio e incluyendo el pensamiento crítico o la deliberación democrática. “Desde la cultura no solo se trabaja lo artístico”, explican fuentes municipales. “La creatividad y la libre expresión son ideas clave para generar espacios de ocio que sirvan tanto para el desarrollo personal y de la comunidad”. Unos espacios que además han de estar muy cuidados y que definen como “amables, seguros, transversales, inclusivos y feministas”.