Muchos de nosotros utilizamos el deporte como medio anti-estrés: libera nuestra mente, nos da un tiempo para nosotros y nos ayuda a conectar con nuestro interior. Además, el deporte aumenta la producción de endorfinas, las hormonas del bienestar, por lo que todo son beneficios.
Puntualizamos: todo son beneficios mientras practiquemos deporte a nivel amateur, porque cuando empezamos a tomárnoslo más en serio y a competir contra otros deportistas la cosa cambia. La competición puede generarnos situaciones de estrés que nos lleven exactamente al lugar opuesto al que estamos buscando.
Controlar los nervios antes de una competición

Una de las cosas que hay que aprender si comenzamos a competir es a controlar nuestros nervios y nuestro estrés los momentos antes de que dé comienzo la carrera o el partido que se vaya a celebrar. Tomarnos unos minutos antes de comenzar para concentrarnos en nuestro objetivo y relajarnos puede ser un buen comienzo.
Además, en estas situaciones es muy importante la visualización: ser capaces de vernos llegando a la meta o marcando en la portería nos dará un plus de confianza que nos beneficiará y nos ayudará a controlar nuestros nervios. Recuerda que si controlas tu abeza, entonces también controlas tu cuerpo.
Tu mayor competidor eres tú mismo

Antes de comenzar a competir contra los demás, quizás sea más importante ser capaces de competir contra nosotros mismos. Debemos ser nosotros los que nos pongamos nuestro propios retos de cara a prepararnos para una competición mayor. Aumentar poco a poco las distancias, mejorar los cronos... son pequeños gestos que podemos ir implementando en cada entrenamiento hasta vernos capaces de competir contra otros.
Sobre todo recuerda que el deporte debe ser algo beneficioso para tu salud, y no algo que te genere más estrés del necesario. Tómate en serio tus entrenamientos, pero ten en mente que son actividades para generarte un beneficio, y no un percance para tu salud.
En el espacio Rexona Maximum Protection
Imágenes | Jupiter Images (modificada), WaveBrakeMedia Ltd., Photodisc
Ver 3 comentarios
3 comentarios
Lady Fitness
El estrés antes de una competición es muy normal, pero también muy traicionero. Yo competí en rítmica mucho tiempo, y el estrés de los minutos anteriores a ejecutar hacía que me sudaran las manos, con el consecuente riesgo además de que se resbalaran aro, pelota o mazas... La visualización, primordial.
teresa_zgz
Yo de momento compito solo conmigo misma, pero me parecen consejos también aplicables a otras áreas, como el trabajo, un exámen... hay que mantener los nervios a raya y quitarle importancia al posible resultado. A mí me funciona muy bien centrarme en el proceso paso a paso.
respuesta
Aunque a veces no es tan fácil ponerlo en práctica, intentaré controlar los nervios.¡Lo prometo!